El futuro del buen funcionamiento de los equipos se encuentra en la inteligencia emocional de sus dirigentes y referentes. Un equipo directivo con alta Inteligencia emocional es una garantía que apunta al éxito.
Ya sabemos que poseer ciertas habilidades de lo que llamamos inteligencia emocional, beneficia a cualquier colectivo, en especial al colectivo empresarial, y fomenta y multiplica los beneficios del trabajo en grupo. Estas habilidades son propias de los buenos líderes.
Son las capacidades sociales y la empatía, las que condicionan los mayores logros cuando se trata de liderar equipos o de organizar el trabajo para conseguir un fin.
Las Habilidades sociales, conforman la capacidad de influir en los demás de forma no violenta. Son signo de madurez, y consiste en generar el deseo en la otra persona mediante la seducción. Esta característica, que es todo un arte, es propia de los buenos líderes.
Cuando alguien tiene empatía, consigue influir sobre las emociones de los demás. Los demás le perciben como a alguien positivo en quien confiar y al que acudir en caso de dudas y problemas. Goleman, no en balde, los llama “imanes emocionales”.
Por eso un buen líder que posee este componente de la inteligencia emocional, sabe encauzar lo positivo de la emocionalidad del grupo para llevarlos a algún objetivo, y no lo hará de forma coercitiva, sino desde la persuasión y la seducción.
Sabe sacar todo lo bueno de las emociones de la gente para garantizar el entusiasmo que les dirigirá a los objetivos. La resonancia de los lideres, consigue llevar a todo el mundo hacia las metas, de una forma no forzada.
Los estados emocionales de los lideres marcan de forma sutil las impresiones de la gente sobre las circunstancias, así, un estado de ánimo sereno por parte de un referente emocional será garantía del convencimiento de estar yendo en la dirección correcta, y mantendrá los ánimos elevados en el grupo.
Un buen líder sabe gestionar sus emociones y las de los demás. Dar una noticia impactante, si se hace desde la emoción, y se apela a la emoción de los oyentes, constituye un paradigma de éxito. La misma noticia dada por dos líderes diferentes puede crear ira y enfado, y otras veces, todo lo contrario.
¿Pero que hace que un líder pueda seducir a la gente?
El cerebro de un verdadero líder estará configurado de una forma diferente y más positiva.
Tenemos un sistema cerebral llamado límbico que es un sistema abierto. Se retroalimenta con las relaciones sociales y permite empatizar con las personas, ayudarles, entusiasmarles y reconfortarles. Sobre todo, entender los sentimientos de otros para orientarles en la dirección adecuada.
Tener empatía o conciencia de los sentimientos y necesidades de los demás es una condición clave cuando se convive con personas. Esta cualidad la emplean los lideres para seducir.
El líder es el guía emocional del grupo. Es el encargado de orientar todas las emociones positivas en una dirección, y dar seguridad al grupo cuando surgen emociones negativas o toxicas. Tener la facilidad de influir, además, sobre las emociones de la gente, es una ventaja que tienen los buenos líderes.
¿Qué puede hacer Mindfulness para crear buenos lideres?
El cerebro lo conseguimos modificar con mindfulness. Cambiarlo en la dirección de la empatía y la seducción de los equipos.
Mindfulness por otro lado, nos da la posibilidad de aumentar nuestro autoconocimiento y nuestro autocontrol. Gracias a la introspección, que nos permite mirar hacia adentro, y poder prever cuales serán nuestras conductas o modo de hacer las cosas.
Todo se conforma mediante un entrenamiento de la atención. Podemos decir que la Atención Plena, es el comienzo del cultivo de la Inteligencia emocional.
Los estados de animo de las personas, dependerán muchas veces del estado de animo de los lideres. Si el líder se altera, todo cambiara, si el líder esta calmado y transmite seguridad, el flujo de los esfuerzos, ira en la dirección correcta. Según Goleman, “el buen humor favorece la eficiencia mental”.
Con el entrenamiento de la atención que conseguimos practicando Mindfulness, ponemos los cimientos de la calma, cimientos en los que se asienta el aprendizaje de las habilidades sociales.
Es imprescindible confiar en la parte intuitiva y, emocional del ser humano, para resolver los problemas y lograr los objetivos.
Las habilidades que nos ayudan a desarrollar la Inteligencia emocional, también nos proporcionan bienestar, resistencia, bondad y optimismo. Todas estas características son perfectos ingredientes en el arte de la seducción.
Conocernos a nosotros mismos, reconocer nuestros estados de ánimo y sentimientos y saber controlarlos, es una característica que indica que somos inteligentes emocionalmente.
Dar una respuesta adecuada en el momento justo, regular nuestras emociones aun retrasando los beneficios a corto plazo, también son signos de Inteligencia emocional. Tener control sobre nuestras emociones nos trae muchos beneficios. Una de las formas de conseguirlo es mediante la Atención Plena.
La importancia de crear un entorno laboral positivo es obvia, y es conseguida por los grandes líderes sin dificultad. Alguien que consiga influir de forma positiva en los demás, no necesita haber resuelto un test de Inteligencia General de una forma brillante, sino demostrar día a día que es capaz de saber tratar a las personas, motivarlas, inspirarlas y seducirlas.
El líder consigue que las personas confíen en él. La inteligencia emocional en su mas alto exponente es todo un arte, y el mejor predictor de la excelencia, en su mas amplio sentido.
LOLA LOPEZ
AUTORA DEL LIBRO MINDFULNESS EMPRESAS. “LA EXCELENCIA EMPIEZA EN TI”. PIDE TU LIBRO : http://myBook.to/MindfulnessEmpresas
TALLERES Y CURSOS DE MINDFULNESS PARA EMPRESAS. MINDFULNESS PARA LA EXCELENCIA EN EL LIDERAZGO
Webs: www.lolalopezpsicologia.com | www.mindfulness-empresas.com